jugadores que interesan al granada

La gestora del Granada CF sigue trabajando. Da pasos lentos pero seguros, trabaja con calma mas con solvencia. Pese a que el aspecto económico sigue siendo su campo de batalla, los miembros de la junta, con el presidente Ignacio Cuerva a la cabeza, no descuidan el ámbito estrictamente deportivo, también piensan en la campaña venidera.

A la espera de que llegue un director deportivo en el que delegar responsabilidades, y que se convertirá en la piedra angular de ese proyecto deportivo, la gestora del Granada ha contactado con futbolistas que entiende son interesantes para el club, esté quien esté tanto al frente de esa secretaría técnica como en el banquillo.

Como la llegada de estas personas puede demorarse algún tiempo, los mandatarios rojiblancos pretenden que los jugadores que podrían seguir en el club, tengan o no contrato en vigor, lo sepan, que sean conscientes de que entran en los planes del Granada.

Este es el caso de hombres que han cuajado una buena temporada y no siguen vinculados al club, como Israel, pedro o Lafuente, o de jugadores que tienen contrato en vigor pero que podrían recibir ofertas de otros equipos –y tienen permiso para marcharse gracias al reciente acuerdo firmado entre plantilla y gestora–, como Jon Altuna u Óscar Martínez.

Se ha mantenido contacto con alguno más y con otros se va a hacer en breve. No se habla ni de ofertas, ni de cantidades, ni de años... sólo un toque de atención, un aviso de que el club no está ni muerto ni perdido, que sigue pensando en el futuro y que reconoce el esfuerzo de aquellos que se han ganado la continuidad. Después, cuando llegue el director deportivo y el entrenador, tiempo habrá de negociar con los que no tengan contrato y también de dialogar con los que lo sigan vinculados.

Sin novedad. En cuanto a la llegada del manido director deportivo, el club sigue buscando, principalmente fuera de Granada, la persona que se adapte al perfil trazado. Las negociaciones podrían acelerarse en las próximas horas, aunque se trata de una decisión vital para el futuro de la entidad y nadie se quiere precipitar.

Por primera vez en años, la serenidad, la realidad y el sentido común impera en una directiva rojiblanca. Que siga así.